sábado, 12 de diciembre de 2015

Rivesaltes. La ruta del exilio, segunda parte

Hace unos años visité la zona de la frontera, siguiendo la ruta del exilio: Maçanet de Cabrenys, La Vajol, Colliure y el Museu de l'Exili en la Junquera. En el año 1939, estos paisajes, algunos preciosos, se llenaron de miles de personas cruzando la frontera sin ningún futuro, más que los campos de concentración franceses. Una de estas personas fue mi abuelo que cruzó por La Vajol para quedar atrapado en el campo de concentración de Argeles-sur-mer, él había dejado a su mujer y a sus hijos en Blanes y huyó del campo para reunirse de nuevo con ellos. 
Vista general del Memorial del Campo de Rivesaltes
Para que mis hijas conozcan esta historia y la de muchos, otros hemos visitado, el memorial del Campo de Rivesaltes recientemente inaugurado por el gobierno francés, un nuevo memorial dedicado al exilio y  todas las personas que a lo largo del pasado siglo han tenido que huir de sus hogares. En este lugar inhóspito estuvieron viviendo a lo largo de 60 años diversos grupos de personas: primero republicanos españoles huyendo de la Guerra Civil, después los judíos y los "indeseables" del gobierno de Vichy y finalmente los "harkis", procedentes de la guerra de Algeria en el año 1962.

Una de las barracas de Rivesaltes
Os recomiendo que consultéis como acceder al campo, el Memorial se encuentra en una zona de polígonos industriales y la señalización aún no está muy elaborada.

En medio de un paisaje desolador se conservan las ruinas de las casas que habitaron personas que huían de guerras o eran hechos prisioneros. En esta zona, el gobierno francés ha construido un edificio subterráneo que se confunde con el paisaje. En el interior, con una presentación austera a base de testimonios de audios, fotografías, audiovisuales y algunos recuerdos de los habitantes del campo se puede seguir la triste historia de las personas que habitaron el campo de Rivesaltes.


Rivesaltes es ahora un símbolo de la vergüenza y del drama de los refugiados. En el memorial, además de recordar, aquellos que pasaron por este campo, se hace un recorrido histórico de los principales éxodos que se han producido durante el siglo XX, a través de diversos audiovisuales. 

Una vez visitado el memorial os recomiendo una visita por el campo, las antiguas barracas hoy destruidas son el testimonio mudo de las dificultades y las penurias por las que debieron pasar los que habitaron el campo de Rivesaltes. 

Si disponéis de tiempo vale la pena visitar El Museo del Exilio en La Jonquera, a 60 km de Rivesaltes. En este caso el Museo no tiene a su alrededor las barracas en las que vivieron los refugiados, pero la cantidad de testimonios y de historias que recoge nos hacen reflexionar sobre la crueldad de estas situaciones.


Entrada al Memorial del Campo de Rivesaltes

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los mosaicos dorados de Ravenna

Ravenna es una pequeña ciudad en la costa italiana del Adriático que conserva una joya singular: un conjunto de mosaicos bizantinos de los s...